Swapetines, intercambio de calcetines tejidos a mano.
Una experiencia muy gratificante.
Tejer para otros no es fácil, debes conocer bien sus gustos, sus deseos, sus caprichos y manías. A falta de conocimiento, la intuición, el análisis detallado de las fotos y comentarios que encuentras en la red, etc. Una verdader aventura para intentar acertar.
Mi objetivo eran unos calcetines para una persona friolera de pies, que dice que los que más lleva son los calcetines sencillos, lisos. Manos a la obra. Pero como no encontaba ningún color que me convenciera decidí mezclar una lana multicolor (Strompegarn Snake) con predominancia de los verdes con otra lana gris (Sock 4) para que le quitara estridencia y le diera clasicismo y combinabilidad.
Como detalles para "rellenar" la caja del envio: Mi pasión son las lanas, en un intercambio entre tejedoras creía que debía añadir algunos ovillos de lanas. Si tejemos calcetines, y sabemos que la persona destinataria es "calcetinera", evidentemente unos cuantos ovillos de lana clásica para calcetines (Sock 4) y algo más fresquito y original: la Arezzo Lin, mezcla de lino, bambú y algodón, aderezado con unos marcadores de madera hechos a mano.
¿Comida? ¿aromas? no, nada dulce, nada salado, nada perfumado. ¿porqué? pues no lo tenia claro, y antes de equivocarme preferí pecar de prudente y no añadirlo al paquete.
Espero haber estado a la altura para mi sorprendida Pilar
Recibir un paquete es algo emocionante. Desde que te apuntas a un intercambio hasta que recibes el paquete estás pendiente, estás pensando, estás disfrutando imaginando quien puede ser tu sorprendedor y qué puede estar tejiendo para ti.
Cuando el paquete llega a tus manos la emoción te impide abrirlo con calma. Ir desenvolviendo los envoltorios de los múltiples paquetes e ir admirando el contenido es algo maravilloso. Colocarlos todos juntos y seguirlos admirando durante varios dias es algo indescriptible.
Gracias sorprendedora mía, Ana
... y hasta el año que viene!! ...